En la Grecia Antigua, era un costumbre que las personas hicieran consultas a los dioses antes de tomar decisiones importantes para sus vidas. La interpretación de las señales divinas era el rol de las sacerdotisas, como era Pítia en el templo dedicado al dios Apolo en Delfos.
Cassotis es el nombre de una fuente de agua cercana a este templo. De acuerdo con la leyenda, beber esa agua y masticar las hojas de laurel eran parte del ritual de Pítia el día que ella recibía a las personas que iban a consultarla.
Así, como las aguas de Cassotis servían como fuente de inspiración para Pítia, que debe haber sido una de las primeras consultoras de la historia ayudando a las personas a tomar decisiones importantes, nosotros también buscamos esta inspiración para ayudar a nuestros clientes. Únicamente cambiamos la dimensión divina por las matemáticas que, incluso, se desarrollaron bastante en esta misma región, en esta misma época...¡pero esto es un tema para otra publicación!