El uso de herramientas de optimización para apoyar la toma de decisiones en múltiples niveles de decisión en la cadena de suministro del comercio electrónico es fundamental para satisfacer las expectativas de los clientes. Desde 2005, el mundo ha experimentado un gran aumento en el acceso a Internet, lo que ha permitido que nuevos clientes compren en línea. Esta tendencia se aceleró con los protocolos de precaución impuestos para la pandemia de Covid-19. Ahora, un gran reto para los minoristas es satisfacer a sus clientes en cuanto a la reducción de los plazos de envío, alimentadas a lo largo de las dos últimas décadas, para un nuevo nivel de ventas.
En 2005, un nuevo programa de membresía creado por Amazon en Estados Unidos sería el punto de partida de una nueva era en el comercio electrónico. El programa ofrecía envíos gratuitos en dos días en todas las compras que cumplían los requisitos mediante una tarifa plana anual. Fue tal el éxito que se convirtió en un estándar de referencia para el sector, mientras que muchos minoristas incorporaron el mismo tiempo de envío para seguir siendo competitivos. La evolución natural de los actores del comercio electrónico fue ofrecer envíos cada vez más rápidos para atraer a nuevos clientes. Hay opciones de envío para el día siguiente e, incluso, para el mismo día para varios productos en muchos mercados.
Garantizar la entrega en plazos tan ajustados es el resultado de múltiples factores en la cadena de suministro de un minorista La ubicación y la capacidad de los almacenes y las tiendas oscuras, el tamaño de la flota, el programa de rutas y la previsión de la demanda son algunos de los factores que las tecnologías de optimización pueden apoyar. Por ejemplo, Mercado Libre, la mayor empresa latinoamericana en valor de mercado en 2020, ha invertido miles de millones en su rama logística derivada, Mercado Envíos. Los informes de la empresa mostraron que, en 2020, el 90% de las entregas fueron realizadas por ellos, mientras que el resto se envió a través de socios o del servicio postal. Sin embargo, en 2017 el 95% de las entregas utilizaron los servicios postales.
Durante muchos años, los modelos de localización de instalaciones han ayudado a tomar decisiones estratégicas para ubicar fábricas y centros de distribución enteros de programación. Las simulaciones y la optimización estocástica son herramientas para analizar los riesgos y el rendimiento de una determinada flota de vehículos en un programa de entregas. Se ha aplicado la heurística para proponer buenas rutas de distribución a diario. Además, las técnicas de minería de datos pueden predecir el comportamiento de los clientes analizando sus compras anteriores.
Con el apoyo de una optimización adecuada, los actores del comercio electrónico pueden situar mejor sus centros de distribución, almacenar los productos con mayor probabilidad de que se pidan cerca de ellos, disponer del número adecuado de vehículos capaces de entregar la mercadería con bajo riesgo de retrasos y minimizar la distancia total durante las rutas de la flota.
El camino para lograr la satisfacción del cliente es saber cómo dimensionar y utilizar la infraestructura logística.
Fuente: Mercado e Consumo
Autor: Guilherme Martino
Coautor: Fabio Silva - Gerente Senior en Cassotis Consulting